La identidad personal, a veces determinada como la personalidad, es un conjunto de elementos que hacen única a una persona dentro de un ámbito social.
Estos elementos de la identidad propia definen a cada persona y las ayudan a reconocerse a sí mismas ante los demás, a pesar de pertenecer a un mismo grupo de iguales.
Existen diferentes características de la identidad personal, que permiten definir el concepto y entender qué es lo que conforma a cada individuo.
¿Qué es la personalidad?
En palabras simples, la identidad personal es un proceso que se desarrolla desde el nacimiento hasta el fallecimiento de cada individuo.
Gracias a ello, las personas pueden gozar de múltiples rasgos que, combinados, las convierten en personas únicas; aunque estos rasgos pueden llegar a ser cambiantes.
Psicológicamente hablando, se cree que la personalidad es algo que cada persona crea para identificarse a sí misma; mientras que en el ámbito filosófico, se piensa que se trata del alma de las personas.
Para crear esta identificación propia, el individuo debe experimentar una serie de factores que afectan positiva o negativamente a su ser.
Elementos de la identidad propia
¿Cómo se conforma la identidad personal? A través de una serie de factores externos que ayudan a cada persona a moldearse frente a las circunstancias. Veamos cuales son:
a. Grupos sociales
A lo largo de su vida, cada persona ha pertenecido a un grupo social diferente de manera voluntaria o involuntaria; ya sea por trabajo, educación, religión, etc.
Debido a esto, se comparten una serie de valores y pensamientos en común, con los que la persona se puede ver identificada.
b. Cultura
Las tradiciones y costumbres de un país o una familia moldean la historia de cada individuo; ya sea con prácticas sociales, culturales, políticas, etc.
Ir a favor o en contra de estas costumbres ayuda a definir una postura, una ideología y una identidad.
c. Orientaciones
Ya sea a nivel político, religioso o sexual, las diferentes asociaciones o instituciones influyen en la identidad de los individuos.
d. Experiencia
La historia personal de cada persona es única e irrepetible, por lo que se puede decir que es un elemento fundamental en la construcción de la identidad.
Estas experiencias están conformadas por una serie de decisiones, buenas y malas o propias e impropias.
e. Educación
El sistema educativo es otro pilar fundamental, ya que desde pequeños se les moldea a las personas para obtener un futuro más o menos determinado.
Esto no se limita solo a las instituciones, también influye la educación en casa y los valores familiares.
f. Intereses
Los pasatiempos y hobbies son un elemento que se puede compartir con muchísimas personas en el mundo, pero que de igual forma es un rasgo personal de cada quien.
Estos intereses ayudan a formar un juicio propio y sobre los demás, y revelan mucho más de la personalidad de una persona de lo que se cree.
Características de la identidad personal
Ahora bien, aunque los elementos de la identidad propia suelen venir de factores externos; también se deben tener en cuenta las características de la identidad personal. Entonces, la identidad es:
1. Individual
Como mencionamos anteriormente, la identidad personal es única e irrepetible, por lo que posee un carácter individual.
Esta individualidad comienza con el nombre de la persona, y continúa con su nacionalidad, edad, profesión, religión, debilidades, salud y muchos más elementos.
Dicho esto, cada persona es un ser diferente, que puede actuar de múltiples formas y relacionarse con otras personas igual de únicas.
2. Constante
A pesar de que la identidad no deja de desarrollarse, existen rasgos que se mantienen constantes a través del tiempo, sobre todo los relacionados a los intereses.
Asimismo, cada individuo puede apreciar los cambios ocurridos en sus rasgos más identificativos.
3. Adaptable
A pesar de que la identidad es constante, también es adaptable. Es decir, a medida que la persona se desarrolla, puede eliminar o agregar conductas, ideologías y pensamientos a su ser.
Además, las personas fácilmente influenciables pueden adaptarse mucho más rápido a las condiciones sociales o grupales.
4. Coherente
Se dice que es coherente porque logra ser predecible en muchos casos, sobre todo cuando la persona se expone a ciertos estímulos o condiciones ya conocidas.
Incluso, por la manera de hablar de alguien ya se puede identificar la clase de persona que es, tanto en buen como en mal sentido.
5. Socio-cultural
Cada rasgo personal invita a relacionarse con otros que posean el mismo rasgo, como sucede con las aficiones o la profesión.
De esta manera, varios seres únicos se sienten parte de una sociedad donde se comparten los mismos valores o ideologías, aunque sigan manteniendo su individualidad.
Las características de la identidad personal son propias de este concepto; no obstante, podemos ver que también influyen en la conducta de cada individuo y lo que lo define.